Historia de Cantón

Según la leyenda, Cantón fue construida sobre el lugar en que cinco genios montados sobre cinco cabras aparecieron para descubrir a la humanidad los cereales. El mito pone de manifiesto la fertilidad de la tierra del delta del Río de las Perlas, una rica zona agrícola cultivada desde tiempos remotos. Por este motivo Cantón se ha llamado tradicionalmente la "Ciudad de las cabras" (Yang Cheng).

El primer asentamiento de Cantón fue un campamento militar llamado Panyu (214 a.C.) que se remonta al período de la primera reunificación china llevada a cabo por Qin Shihuang DI (221 a.C). Con la dinastía Han (del 206 a.C. al 220 d.C), la ciudad cobró un gran desarrollo y se convirtió en la capital de los Yue, familia imperial que gobernaba el sur de China durante el período en que los Han se consolidaban en el norte; de esta época son los importantes restos arqueológicos hallados en la tumba de Zhao Mao, cuyo título dinástico era Wen Di (del 137 al 122 a.C), último emperador Yue tras cuyo reinado el territorio quedó bajo dominio de los Han. Con las dinastías Tang (del 618 al 906) y Song (del 960 al 1279), la ciudad volvió a experimentar un importante desarrollo favorecido por los intercambios comerciales; a su vez, las campañas militares de aquel período tuvieron como resultado el asentamiento de comunidades de extranjeros que introdujeron en la ciudad otras religiones diferentes a la china (musulmana, cristiana, judía y persa). Durante la primera época Ming, en que tuvieron lugar las grandes expediciones por mar del eunuco Zheng He (de 1371 a 1434), los astilleros de Cantón desarrollaron una gran actividad, lo que supuso otro gran impulso para la ciudad.

El descubrimiento de la ruta de las ndlas a través del Cabo de Buena Esperanza por la expedición capitaneada por Vasco de Gama (1497) supuso para Cantón (y para todo Asia sudoriental) el primer contacto con las potencias europeas; en 1514 llegaron a la ciudad los portugueses, seguidos más tarde por españoles (1543) y holandeses (1600), y poco después por ingleses, franceses y americanos. Las autoridades chinas permitían que las naves europeas anclaran en el puerto de Whampoa (situado a 20 km de Cantón), pero la tripulación estaba obligada a pernoctar en ellas, porque la ley prohibía a los extranjeros vivir en tierra china. San Francisco Javier moría en 1552 sin poner un pie en la tierra que había querido evangelizar; en 1583, el jesuíta Matteo Ricci logró de las autoridades chinas el permiso para residir en Zhaoqingfu, en los alrededores de Cantón, pero no pudo llegar a Pekín hasta 1598, y hasta 1601 no consiguió permiso de residencia. Entre tanto, la ciudad de Macao crecía en la desembocadura del Río de las Perlas bajo el control de los portugueses, por lo que esta ciudad se convirtió en la "puerta de China" para todos los extranjeros (misioneros incluidos) que no podían residir en suelo chino; fue también un lugar de refugio cuando arreciaban las persecuciones contra los extranjeros.

Los intereses comerciales que sustentaban la política expansionista de los occidentales estuvieron en la raíz de los acontecimientos sucedidos en Cantón en el siglo XIX. En 1839, Un Zexu, funcionario enviado por el gobierno a la ciudad para controlar la venta de droga que entraba a China por el puerto de Cantón, quemó numerosos cargamentos de opio para mostrar la firmeza de los decretos imperiales por los que se prohibía su consumo; el resultado de esta acción fue la respuesta militar de los ingleses y la declaración de la Primera Guerra del Opio, que concluyó con el tratado de Nankín de 1842, el primero de una serie de tratados injustos que dejaron a China en condiciones de inferioridad jurídica y militar en sus enfrentamientos con las potencias occidentales. En 1857, después de la Segunda Guerra del Opio, que sirvió para que los extranjeros establecieran definitivamente su presencia y sus privilegios en China, las tropas anglofrancesas tomaron Cantón. Los episodios de violencia y el clima de confusión e inseguridad que reinaba en la ciudad fueron sin duda determinantes en la gestación de un sentimiento de rebeldía en la población cantonesa, tanto frente a los extranjeros como a la propia dinastía Qing; no es una casualidad que fuera en la provincia de Guangdong donde se gestara la revuelta de Taiping que se extendió a toda China (entre 1843 y 1864), ni que las sociedades secretas proliferaran en esta región.

A comienzos de siglo, Cantón vivía un ambiente sensible a los nuevos vientos democráticos, ío que explica que en 1911 se sumara al levantamiento contra los manchúes llevado a cabo por Sun Yatsen (nacido en Cuiheng, al sudoeste de Cantón) en Wuchang, población de China central.

Cantón ha sido protagonista de Importantes acontecimientos históricos de nuestro siglo: en 1923 la ciudad fue testigo de la reorganización del Guomindang llevada a cabo por Sun; en 1926 Mao Zedong dirigió en Cantón la primera escuela del Partido Comunista Chino; en 1927 se creó la Comuna de Cantón, experimento de autogestión popular reprimido brutalmente por las tropas de Chiang Kaishek. En la actualidad, Cantón es una importante ciudad comercial e Industrial puente de relaciones con todo el mundo; es también sede de prestigiosas universidades (la más importante es la de Sun Yatsen).