Hong Kong engancha, aturde los sentidos y hace que uno pida más. Es rápida, vibrante y llega al límite.

Hong Kong es una metrópolis en el sentido real de la palabra. De los 7 millones de habitantes que esta ciudad tiene, la mayor parte son chinos, pero también hay muchos pakistaníes,indios,filipinos, europeos y de muchos otros lugares que consideran a Hong Kong su hogar—y todos han conseguido impregnar de su sabor a la mezcla que representa Hong Kong.

En 1997, los británicos devolvieron Hong Kong a China bajo el marco de ¨Un país, dos sistemas, ¨en el cual se garantizaba a Hong Kong un alto grado de autonomía durante 50 años. Como ciudad oriental gobernada por occidentales, su historia le ha aportado una distintiva mezcolanza de oriente y occidente. El pasado y el presente conviven en los templos llenos de humo de incienso, los enormes rascacielos y las densamente pobladas zonas urbanas,mientras que, en las islas cercanas, la naturaleza sigue su tranquilo ritmo vital.

Hong Kong cubre un área de un poco más de 1.000 kilómetros cuadrados y está dividida en la Isla de Hong Kong, Kowloon, los Nuevos Territorios y las islas del exterior. La Isla de Hong Kong es el marco de uno de los perfiles de rascacielos más reconocibles del mundo. En Central, los edificios parece que se extiendan hasta el cielo y en la tierra parece que hay una cantidad infinita de ajetreadas personas durante todo el día. La isla de Hong Kong es en realidad muy empinada y,cuando se pasea de Central a las zonas residenciales de los niveles medios, parece que se está subiendo una montaña. Afortunadamente, aquí se ha construido la escalera mecánica más larga del mundo (800m). La Escalera Mecánica Central parte del cruce entre la calle Central Qucens y la calle Queen Victoria y tiene su fin en la parte superior de la calle Conduit. Hay que usarla después de las 10 am, antes solamente desciende. Es gratuita. Pasa por la zona del Soho, donde se pueden ver mercados de comida y restaurantes encajonados entre altísimos edificios. El ritmo frenético de la parte norte de la isla da paso a playas y lugares de descanso.

Kowloon, que se encuentra frente a Hong Kong al otro lado del puerto, en la punta de la península, es una de las zonas más densamente pobladas del mundo. Los edificios aquí no son tan deslumbrantes como en la isla,pero aún así, es una zona comercial muy dinámica. En la zona de Tsim Sha Tsui, hay casi tantas tiendas de cámaras fotográficas como personas hay en Hong Kong. En el interior de los edificios, los centros comerciales funcionan continuamente—se ha de visitar Harfoour City que tiene su entrada del sur en la terminal del Star Ferry. Si las compras son una droga, aquí se puede llegar a la sobredosis—no hay nada mejor que Nathan Road como el eje de la acción,con restaurantes, tiendas y bares. En Kowloon hay muchos mercados muy animados, algunos de los mejores se encuentran cerca de la estación Prlnce Edward MTR, en el extremo norte de Nathan Road; el mercado Yuen Po Street Bird,el Mercado de las Flores y el mercado nocturno de Temple Street, por nombrar unos cuantos.

Entre todas las compras es fácil olvidar que Hong Kong también es muy rica en experiencias culturales. Como recordatorio para explorar mas allá de los centros comerciales y las boutiques, el Centro Cultural de Hong Kong es un buen lugar para comenzar con una muy buena sección histórica y una sección de arte contemporáneo. También conviene mirar las programaciones de actividades y actuaciones especiales que se celebran en el centro. El Museo de Historia, en la calle Chatham, ofrece perspectivas del Hong Kong anterior a los rascacielos cuando no era nada más que una roca pelada.

Un respiro agradable del ajetreo de las calles consiste en visitar los Nuevos Territorios y sus islas exteriores. Muchos visitantes se sorprenden de que aparte de Hong Kong y de la isla de Kowloon, haya más cosas que ver. Las zonas rurales y reservas naturales están a galaxias de distancia de la glamour y del brillo del Hong Kong urbano. Este es también el lado espiritual de Hong Kong; hay muchos monasterios y templos para explorar. No muy lejos de Tsuen Wan hay un hermoso templo taoísta, el Instituto Yuen Yuen. Cerca de aquí se encuentra la montaña más alta de Hong Kong, la Gran Montaña Neblinosa. Con 957 metros de altura, es una escalada no demasiado difícil y la recompensa es una espléndida vista. Otro misterioso monasterio es el de Po Lin en la isla de Lantau. Al lado del Templo se encuentra el Buda Tian Tan—la fama de este Buda proviene de su tamaño: es la estatua de bronce más grande de Buda en un exterior. Se puede contemplar una excelente vista de las colinas de los alrededores una vez se han subido las escaleras hasta donde se encuentra el Buda.

El uso del inglés está muy generalizado en Hong Kong y los rótulos de las calles son bilingües. La inmensa mayoría de la población, en torno al 94%, habla chino cantones, aunque el mandarín está en alza desde la devolución de la colonia y la llegada del turismo de masas de continental chino.