Clima y Tiempo de China

El interés del turista que visita China con respecto al clima estriba principalmente en el tipo de ropa que precisa según la época del viaje y la estación más aconsejable para su realización. Al tratarse de un país tan inmenso, es preciso que se determinen con precisión las zonas que se recorrerán, debido a los diferentes climas que pueden encontrarse en una misma época del año.

Una característica general es que casi la mitad del territorio se ve afectado con mayor o menor incidencia por los monzones, lo que produce dos estaciones diferenciadas; un invierno largo, frío y seco y un verano caluroso y lluvioso. Debido a que buena parte del país queda alejado de la influencia suavizadora del mar, las variaciones térmicas son considerables.

El monzón invernal corresponde a una larga etapa anticiclónica (tiempo estable con presión atmosférica alta), con vientos fríos y secos del norte asolando toda la China con la excepción de la alta meseta Qinghai-Tíbet y la Región autónoma de Xinjiang. Los aires siberianos continentales determinan unas temperaturas muy bajas que, comparativamente con otros puntos de la tierra situados en la misma latitud, parecen muy rigurosos.

Los monzones estivales son calurosos y húmedos, proceden del Océano Pacífico y del Océano índico, suelen llegar al sur de China en abril/mayo y desaparecen entre septiembre y octubre.

Tradicionalmente, los chinos dividen el país en dos zonas: al norte y al sur del río Yangtze. Las casas, oficinas y escuelas del norte tienen calefacción, mientras que el sur carece de ella, lo que da idea de las diferencias climáticas.

Norte

Ciudad Turística: Beijing, Xian, Luoyang, Datong, Pingyao…

Las temperaturas se mantienen bajo cero durante largos períodos (la temperatura media de Beijing en enero y febrero es de -4 °C). Por el contrario, los veranos son carrosos, húmedos y muy lluviosos. El otoño y la primavera son, pues, las estaciones más Templadas, y la mejor época para admirar un paisaje que en esta época se muestra espléndido de luz y colorido.

Sur

Ciudad Turística: Shanghai, Guilin, Hong Kong…

Sin embargo, al sur del Yangtzé los inviernos son templados: en enero la temperatura media de Cantón es de 15 °C. Los veranos son más húmedos y bochornosos que en el norte, pero todos los hoteles y restaurantes tienen aire acondicionado. Por lo tanto, cualquier época del año es buena para visitar el sur del país, aunque conviene tener en cuenta las altas temperaturas del verano y, si es posible, evitar los meses de julio y agosto (las ciudades conocidas como los tres "homos" de China se encuentran en la cuenca del Yangtzé: Nanjing, Chongqing y Wuhan).

El verano es la mejor estación para visitar una región como Mongolia, casi inaccesible en invierno, mientras en junio la estepa florece y la temperatura es fresca y agradable, sobre todo por las noches.

Lo mismo ocurre en Tíbet: los meses comprendidos entre mayo y octubre son los mejores para visitar la región (en agosto la temperatura media de Lhasa es de 17 °C). En la provincia montañosa y desértica de Xinjiang situada en el extremo occidental los inviernos son muy fríos y los veranos muy calurosos, aunque se trata de un calor seco que resulta más llevadero.

Por último, la región de Yunnan, a la que los chinos llaman el país de la ¨eterna primavera¨, se puede visitar en cualquier estación; en la altiplanicie donde está situada Kunming, la capital, la altitud es de 2,000 metros y la temperatura media va de los 8 °C en enero a las 19 °C de julio. En general, si el viaje por Cina incluye la visita a zonas distantes entre sí, lo mejor es viajar en las estaciones intermedias.

Zonas Climáticas

Un complejo puzzle de zonas climáticas dibuja el mapa chino. Tres son las principales causas de estas variedades: la situación geográfica, según sea la latitud y la distancia respecto al mar; el relieve, según las diferentes altitudes y dependiendo de la dirección de las cordilleras y la tercera causa hace referencia a la influencia monzónica.

Hay una constante que casi siempre se cumple en cada provincia y región: cuanto más al norte se viaje menor es la media de temperaturas y cuanto más al oeste, menores son las precipitaciones.

A grandes trazos se pueden diferenciar once áreas, aunque esto signifique generalizar extraordinariamente las zonas climáticas, cuando menos puede dar una somera idea del tipo de clima predominante.

En China pueden distinguirse cuatro áreas climáticas de sureste a noroeste, según el índice de aridez (cociente entre evaporación y precipitaciones).

China húmeda (índice de aridez inferior a 1, precipitaciones anuales superiores a 750 mm), que abarca las zonas costeras meridionales, el sur subtropical hasta las estribaciones del Tíbet, las penínsulas septentrionales de Shandong y Liadong, la punta norte del país (llanuras de los ríos Ussuri y Sungari) y la zona templada fría.

China semi húmeda (índice de aridez entre 1,0 y 1,5, precipitaciones anuales de 500 mm), que comprende las llanuras septentrionales y las vertientes oriental y suroriental del Tíbet.

China semiárida (índice de aridez entre 1,5 y 2,0, precipitaciones anuales de 300 mm), que incluye las mesetas de loess de Shanxi y Shaanxi, la parte sur del Tibet, la meseta de Qinghai y la vertiente oriental del macizo de Nan Shan.

China árida (índice de aridez superior a 2,0, precipitaciones anuales de 250 mm), que se extiende de norte a oeste por la parte norte del Tíbet, las regiones desérticas de Gobi, la cuenca del Tarim con el desierto de Taklamakan y el macizo de Tian Shan.

Al cambiar de zona las precipitaciones disminuyen y los paisajes se diversifican: de los bosques húmedos del sur y las estepas herbosas del norte (China húmeda) se pasa a las praderas alpinas de China semi-húmeda, al bosque, las praderas alpinas y los desiertos fríos de China semiárida y a las estepas desérticas y los desiertos de China árida, donde no existen cultivos agrícolas.

Como puede verse, China presenta una gran variedad de climas. La mayor parte del territorio cae dentro de la zona templada (China húmeda), con clara división entre las cuatro estaciones, sobre todo en lo que a temperaturas se refiere. Por ejemplo, en Beijing se llega a los 3035 °C en verano para bajar a los 10 °C en invierno; en Hohhot, Mongolia, la oscilación térmica verano invierno puede llegar a 3832 °C; en Cantón, al sur del país, en verano se alcanzan los 40 °C y en invierno no baja de 1015 °C. En cuanto a precipitaciones, las lluvias se concentran en un breve período del verano (el 65 por ciento del total) y la estación seca es muy larga en el noreste, norte y Mongolia. La estación lluviosa dura de mayo a octubre a causa de los monzones en el sur.

Algo peculiar de China es una cierta similitud de clima entre las regiones septentrionales y meridionales de la misma zona climática, pese a estar muy distantes entre sí. Obedece a la presencia de los monzones, provocados por la diferencia de temperatura entre el continente y el océano. En invierno, las masas de aire acumuladas en Siberia y Mongolia se desplazan al sur, provocando un clima invernal más severo que el de otras ciudades de la misma latitud (Beijing se halla en el paralelo 40°, igual que Castellón de la Plana, pero su invierno es más frío). Las cordilleras más altas del país obstaculizan el paso de los vientos fríos del norte, por lo que su vertiente meridional ofrece un clima relativamente cálido incluso en invierno (de ahí que se hable de la "eterna primavera" de Yunnan). El monzón de verano supone unas precipitaciones de 1.0002.000 mm anuales en el sur, se adentra en el continente hasta unos 3.500 km y con ello equilibra las temperaturas entre regiones meridionales y septentrionales.

En el Mar de China Meridional se originan violentos tifones tropicales que asolan las costas en verano y otoño, con vientos 10 a 36 metros por segundo (viento fuerza 12), sobre todo en Guangdong y Fujian, aunque también pueden dirigirse más al norte, a Jiangxi, Hunan y Guangxi.

Pronóstico del Tiempo en las Ciudades de China