La época de esplendor de la Dinastía Tang fue la época de oro de la composición poética en China. El gran genio poeta romántico de China, Li Bai (701-762), fue el personaje destacado del parnaso de los poetas de dicha época. Su poesía reflejó plenamente el panorama extenso de la literatura de la época de prosperidad de la Dinastía Tang y constituyó el éxito supremo de la literatura de aquella época.
Li Bai dispuso de grandes talentos literarios. Otro gran poeta del mismo período, Du Fu (712-770), le alabó de esta manera:
Antes había una persona maníaca./ Le llamaron inmortal desterrado del Cielo./ Conmovía al viento y la lluvia cuando se puso a escribir./ Lloraban los fantasmas y dioses cuando su poesía estaba compuesta.(Recordando a Li Bai en un Día de Primavera).
Con un espíritu heroico y ferviente, así como un estilo vigoroso y romántico, la poesía de Li Bai ejerció una influencia de largo alcance sobre las generaciones posteriores, y fue objeto de buena acogida por los chinos durante tanto tiempo, incluso cuando empezaron el estudio, casi todos los niños aprendieron a recitar uno de sus poemas, titulado Reflexiones en Noche Silenciosa, que dice:
Un hilo de luz lunar delante de mi cama, / Sospechaba que fuera escarcha sobre el suelo./ Mirando hacia arriba vi la luna clara, / Bajando la cabeza añoraba a mi tierra natal.
Las experiencias y aspiraciones de vida produjeron grandes impactos sobre la formación del estilo y la fisonomía de su poesía. En la adolescencia, Li Bai estudió en el terreno montañoso de su pueblo natal. Salió de casa alrededor de los veinte años para recorrer por el país, dejando sus huellas en mayor parte del territorio chino. Muchos de sus poemas que describieron el paisaje de la naturaleza gozaron de gran popularidad. Leamos uno de ellos, titulado Visitando Catarata de Montaña Lu:
Retrato de Li Bai
Los incensarios despidieron humo violeta bajo el sol./ Se divisaba la catarata colgada en la montaña de lejos./ Se precipitó el agua volando desde una altura de 3 mil chi./ Como si la Vía Láctea cayera del cielo.
El lenguaje del poema fue fresco y natural, claro y vivo, con una metáfora gráfica, exagerada y singular, y unas imaginaciones que volaron fuera del planeta. El poeta expresó claramente el amor y la admiración a la naturaleza. Los versos formaron un conjunto coherente, encerrando afecto y encanto inagotables.
Li Bai vivía durante los períodos de Kai Yuan y Tian Bao de la Dinastía Tang, con el emperador Xuan Zong en el poder. El período de Kai Yuan (713-741) fue llamado en la historia "período próspero de Kai Yuan", cuando el país está unificado, se alcanzó una prosperidad social, económica y cultural nunca vista antes en la historia, y los intelectuales encontraron más oportunidades y condiciones para desplegar sus talentos, e incluso de hacer contribuciones y emprender una causa. En ese ambiente, se suscitaron los elevados sentimientos y las aspiraciones, así como el espíritu emprendedor de los hombres talentosos como Li Bai. Li Bai fue una persona elegante y desfrenada, y tenía confianza en sí mismo. Cuando era joven, le gustaba leer libros extraordinarios y crear prosas, por lo que se notaron los primeros indicios de sus talentos literarios. Aprendió la esgrima cuando era pequeño y llevó una vida caballeresca por algún tiempo, experiencia que se reflejó en su poesía:
No me daba cuenta de las cosas cuando alcancé la mayoría de edad./ Todos mis amigos eran personas de habilidades excepcionales / Llevando una vida en el destello de armas blancas./ Quisiera eliminar a los malhechores de la sociedad humana.
Fue bastante manifiesta la satisfacción de su comportamiento caballeresco, actitud que no fue debilitada en sus obras posteriores. A través de poemas de Canción del Hombre Caballeresco y Canción de Heroicos de Fufeng, Li Bai expresó francamente su admiración y envidia a los héroes caballerescos de la antigüedad, quienes hicieron promesas solemnes, eliminaron los males y propagando los bienes, además de despreciar los honores académicos y rangos oficiales. El objetivo de fondo fue expresar sus deseos de convertirse también en un héroe o asesor, lo que precisamente manifestó el hecho de que abarcaba la ambición y la capacidad de superar la época turbulenta e imponer la paz.
Li Bai fue una persona bastante presumida y tuvo mucha confianza en sí mismo, lo cual constituyó una de sus características más destacadas. Al mismo tiempo, tuvo una fuerte pasión por participar en la política, convencido de que tenía la aptitud comparable con los funcionarios talentosos y primeros ministros de los tiempos pasados. Especialmente cuando el país se hundía en disturbios internos, Li Bai suspiró por ser encomendado importantes responsabilidades por los gobernantes, para desplegar la sabiduría y los talentos de establecer la situación social, reprimir las rebeliones y administrar asuntos de la nación. No obstante, no obtuvo tales oportunidades durante toda la vida. En cambio, en su carrera de un funcionario llena de frustraciones, fue degradado en dos ocasiones, pasando muchas dificultades y penalidades. Intentó en vano entrar en la sociedad, por lo que las indignaciones provocadas por la combinación de la ansiedad y la desesperación se exteriorizaron de la punta del pincel. Escribió muchos poemas como "Duros Caminos de Shu" y "Duros Caminos del Mundo", que al parecer describieron la dificultad de los viajeros en los caminos, en efecto expresaron la angustia espiritual del poeta. Mientras los malos estaban en el poder, él mismo no podía llevar una carrera feliz de funcionario, ni desplegar sus talentos, por lo cual sería difícil realizar sus aspiraciones, y manifestó las exclamaciones de "¡Qué duros son los caminos, más difíciles que subir al cielo!" A los 42 años, Li Bai fue llamado por el emperador Xuan Zong de la Dinastía Tang para que sirviera a la corte. Creyendo que por fin tuvo la oportunidad de poner en buen uso todos sus talentos, estaba tan excitado que "salió riéndose sardónicamente", confiando que "¿Cómo es posible que talentoso como yo fuera un don nadie?" Pero en ese momento, Xuan Zong ya no era el soberano animado a hacer enormes esfuerzos para gobernar bien el país del pasado, sino se entregaba a disfrutar los placeres. Li Bai fue nombrado no más que un escritorzuelo a sueldo, encargado de encomiar los méritos y las virtudes del emperador, sin la menor posibilidad de realizar sus aspiraciones políticas. Poco más tarde, por las envidias y suplantaciones de los personajes influyentes de la corte, Li Bai se obligó a salir de la capital Chang'an, para viajar por el sur. Una de sus obras más representativas, "Visitando la Montaña Tianmu en el Sueño", fue cumplida en esa época. Puesto que no encontraba salida de la vida en el mundo real, intentaba librarse en las imaginaciones ilustres .En el mundo de ensueño, inventó un mundo de las hadas, distante de la vida vulgar, con un paisaje maravilloso y mágico. La coexistencia del efecto maravilloso y la oscuridad borrosa reveló la anhelación por la libertad espiritual y el miedo hacia el sombrío de las realidades del poeta. Pero el mundo de ensueño desapareció en un abrir y cerrar de ojos, todos los espectáculos maravillosos ya no existieron al despertarse, por lo que no pudo contenerse de sentirse decepcionado, como si se le perdiera algo. Al final del poema, Li Bai suspiró con emoción que la felicidad de la vida mortal no era sino como el mundo de ensueño, que desapareció en un instante, y dijo con orgullos que "¿ Cómo puedo inclinarme para atender a los personajes influyente, quitándome de alegría?"
Taibai Emborracho, pintura de Su Liupeng, de la Dinastía Qing.Muestra la escena en que dos servientes internos sostenían a Li Bai, emborracho en el palacio del emperador Xuan Zong (Li Longji) de la Dinastía Tang.
Por otra parte, ante la realidad de que creía que tenía talentos singulares pero no encontraba oportunidad de desplegarlos, Li Bai tenía una manera particular de divertirse para ahuyentar la depresión, pues la luna y el licor fueron contenidos indispensables de su poesía. Por ejemplo, "Cinco Poemas Compuestos sobre la Visita en Lago Dongting con Mi Tío Li Ye, Viceministro de Penalidades y Jia Zhi, Secretario Imperial" (El Segundo), que dice:
Noche de otoño sin humo en Lago del Sur, / ¿Por qué no subimos al cielo a favor de la corriente? / No estará mal fiar al lago una luz lunar, / Barqueamos hacia la nube blanca para comprar licor.
El poema expresó la despreocupación y la satisfacción de la comunicación entre el corazón y la naturaleza, de forma ágil y extraordinaria. Con los últimos dos versos de fiar al lago una luz lunar y comprar licor al lado de la nube blanca, Li Bai otorgó intereses humanos a la naturaleza. El poeta tuvo un corazón honrado e ingenuo, latiendo en armonía con la naturaleza, por eso toda clase de sentimientos vinieron a la mente al presenciar las montañas y los ríos. Entre el lago azul y la luz lunar, así como la nube blanca y las ganas de beber vino, parecía que el poeta había encontrado un refugio espiritual como la Tierra de las Flores de Melocotonero, donde no volverá a hacer alborotos del mundo vulgar y podía dar riendo suelta a los ánimos, mostrando completamente las cualidades y el aspecto de elegancia y naturaleza del poeta.
En la tradición literaria de China, la luna tenía una belleza misteriosa y nebulosa, que siempre despertó la nostalgia de la gente, especialmente el añoramiento del pueblo natal, pues " la luna de la tierra natal es más clara". En la literatura china, hay innumerables artículos que manifestaron sentimientos por medio de la luna, y en las leyendas antiguas también hay muchos cuentos hermosos relacionados con la luna. La fiesta tradicional de China, Fiesta de la Mitad del Otoño, enfatizó especialmente la significación de "reunión familiar" de la luna. Ofrecer sacrificios a la luna y contemplar la luna llena constituyen costumbres importantes de la Fiesta de la Mitad del Otoño. Al mismo tiempo de reunirse jubilosamente bajo el mismo techo, la gente echa de menos a las personas queridas en lugares lejanos, diciendo que "una luna clara emergió sobre el mar, contemplamos la misma luna con aquellos del otro extremo del mundo". Por su parte, Li Bai extendió al máximo nivel el significado de la luna a través de la poesía. En el poema titulado "Canción de Luna Clara del Pasado", escribió la luna de esta manera:
No conocía la luna de pequeño, / Llamándola plata de jade blanca./También la sospechaba de espejo de hada, / Volando sobre las nubes.
El poema comparó la luna con una plata de jade blanca y un espejo usado por las hadas, tan familiar como misterioso. En el poema arriba mencionado, Reflexiones en Noche Silenciosa, los dos versos que dicen "Mirando hacia arriba vi la luna clara, / Bajando la cabeza añoraba a mi tierra natal.", expresaron francamente que añoraba al pueblo natal cuando miraba la luna, destacando la soledad de vagabundear sin objeto en tierra extraña. Entre un levantar y bajar de cabeza, las penalidades de llevar una vida vagabunda por varios años y la nostalgia hacia el hogar tranquilo llenaron el corazón, haciendo que los lectores sintieran la misma melancolía. En otro poema titulado " Carta Desde Lejos al Enterarme de la Degradación a Longbiao de Wang Changling", escribió:
Caídas flores de álamo y cantando cuclillos./ Oí que fuiste degradado a Longbiao, / Tan lejos que hay que cruzar cinco ríos para llegar./ Permítame depositar las preocupaciones sobre ti en la luna, / Para que te acompañe hasta el oeste de Yelang.
Con la combinación de "preocupaciones" y "la luna", se desbordaron de los versos el añoramiento después de la despedida y las preocupaciones del destino del amigo, como si se extendieran interminablemente hacia la lejanía entre las montañas y los ríos.
Li Bai llevó una vida deprimida por no haber realizado sus ambiciones, conquistado de indignaciones y tristeza difícilmente de superar, por lo que recurrió temporalmente a la poesía y el vino para desahogarse. Tuvo las experiencias de la vida caballeresca y también realizó viajes y estudió el taoísmo, influido en cierto grado por la cultura taoísta, por lo cual su poesía siempre contenía las ideas de mantenerse apartado del mundo y de no perseguir fama ni lucro. Li Bai buscaba poner en buen juego sus talentos en la política por un lado, y despreció la alta posición y la gran riqueza derivadas de los méritos políticos por otro. En su mente no sólo había el factor confuciano de entrar en la sociedad para "salvar al mundo", sino también el factor de retirarse del mundo apartado de los asuntos de la escuela taoísta. En realidad, Li Bai tuvo un pensamiento bastante complicado, que no bastaría ser explicado solamente por las influencias de las dos culturas. Así dijo en uno de los poemas entregados a sus amigos:
Espere a que haga lo más posible para dedicarme al servicio del emperador sensato, / Para que te acompañe en el viaje sobre nubes.
Deseaba realizar las aspiraciones al servicio de un emperador sensato, pero consideró que la naturaleza apartada del mundo vulgar sería su destino ideal. Sin embargo, tales ideas sufrieron tantos golpes en la realidad que siempre sentía la temporalidad de la vida y la brevedad de la riqueza y el honor, así que más valdría divertirse a tiempo y las mejores maneras de estar despreocupado eran beber vino y contemplar la luna.
En Bebiendo Solo Bajo la Luna, vimos claramente a un poeta romántico, abatido y solitario pero elegante y despreocupado que se ofrecía y bebía vino por sí solo y se buscaba la alegría cantando a sí mismo:
Disponiendo una vasija de vino en matorral de flores, / Me ofrecí y bebí solo sin ningún pariente al lado./ Invité a la luna levantando la copa, / Seríamos tres junto con mi sombra./ La luna no me comprendió, / La sombra tenía que acompañarme silenciosamente./ En compañía de la luna y la sombra, / Tenía que divertirme a tiempo./ La luna deambulaba conmigo cuando recitaba versos, / La sombra bailaba ágilmente cuando bailaba de alegría/Cuando estaba despierto les compartía la alegría, / Cuando estaba emborrachado no encontraba sus rastros./ Que anudemos una amistad eterna, / Para reunirnos en el cielo nuboso algún día en el futuro.
Las flores, la luna, el vino, las canciones y el baile, así como un poeta romántico y su sombra solitaria, conformaron un dibujo claro y bello.El poeta cantaba en voz alta levantando la copa entre las flores y bajo la luna, acompañado por sus sombras, para disipar las angustias provocadas por las realidades.Sin embargo, la luna no podía entender la causa de su emborrachamiento, la sombra tampoco percibía sus preocupaciones.Por eso el poeta optó por darse rienda suelta a divertirse, intentando olvidar las angustias de la vida real.Esta forma de tratar las angustias se reflejó más explícita en "Invitación para un Vino", poema que expresó a fondo el descontento y la indignación sobre las realidades oscuras.
Sobre los talentos extraordinarios y las cualidades obstinada e indisciplinada, así como su sentido de amor propio de Li Bai, Du Fu evaluó escribiendo:
Por cada diez Dou de vino bebido, / Li Bai pudo crear cien poemas./ Si se emborrachó se acostó en taberna de Chang'an, / Incluso llamado por el emperador rechazó a subir al barco, / Diciendo que soy un inmortal bebedor que no quería ir a ningún lugar.("Canción de Ocho Inmortales Bebedores")
Los talentos literarios y el encanto característico de Li Bai constituyeron grandes atracciones para las generaciones posteriores, pues poetas sobresalientes como Su Shi y Lu You recibieron influencias de él.Pero todas las generaciones posteriores estaban demasiado atrás para pisarle los talones de Li Bai, en lo que se refiere a la creatividad original y el espíritu heroico propios del poeta, "con palabras superando el límite de la tierra y el cielo, y un pensamiento más allá del mundo de fantasmas y dioses".