Yurtas Mongolas

La yurta mongola es una casa circular coronada por un domo que en la mayoría de los casos tiene un diámetro de entre cuatro y seis metros. Básicamente consiste de un marco de madera que sostiene una cubierta de fieltro.

Los mongoles son mómadas, y normalmente se mudan dos veces por año. En mayo, cuando el clima es cálido, parten en busca de un lugar con un suministro abundante de agua y pastos verdes para alimentar su ganado. En octubre, cuando las temperaturas caen, migran a un área relativamente templada para pasar el invierno.

En la parte superior hay un techo removible, el cual puede ser abierto para permitir la entrada de luz solar y para ventilar la yurta. Al interior, el área de dormitorios está ubicada cerca de la entrada, y la chimenea está justo en el centro. Sobre el suelo y en las paredes hay coloridas alfombras de fieltro que hacen del lugar un espacio acogedor, a pesar de su reducido tamaño.

Las yurtas son estructuras portátiles que requieren de sólo dos horas para ser desmanteladas. Luego son transportadas a lomo de camello o en carros tirados por caballos.